Córdoba: encontraron muerta a Abril Sosa

En un baldío a unas 10 cuadras de su casa fue encontrada muerta Abril Sosa, la nena de 4 años que era buscada con desesperación desde la medianoche del sábado. Detrás de su crimen hay una “pista narco”, según dijo la fiscal que interviene en la causa, Claudio Palacios; pero también admitió que el sospechoso detenido “podría ser un pedófilo”.

Al mediodía de hoy, la funcionaria planteó su sospecha de un “ajuste de cuentas” y respondió “más o menos” cuando se le consultó si era optimista respecto a encontrar viva a la nena. “Es un caso complejo y problemático. Que preocupa no solo al Poder Judicial, sino también al Ejecutivo”. Recién afirmó que trabaja también sobre la hipótesis de un depravado.

La madre de Abril, Mayra Sidra, en la última de las versiones de la desaparición que dio afirmó que “Daniel” la había llevado a comprar caramelos. Ludueña era el hombre, quien esta mañana se fue de su casa con un bolso. Fue detenido hace un rato.

El ajuste de cuentas mencionado por la fiscal se explica porque los padres de la nena son consumidores y la mamá tendría una deuda por drogas. En diciembre la amenazaron: “Te vamos a hacer cagar un hijo”.

A primera hora de esta tarde, la división Homicidios tomó intervención y esa participación fue un adelanto de que se temía lo peor. Abril fue hallada en un terreno baldío donde hay acoplados abandonados de una empresa de transporte.

Los vecinos de la familia Sosa esta tarde atacaron la casa de un hombre que solía compartir tiempo con la familia. Es una suerte de “pensión”, a la vuelta de la de la nena, que había sido allanada por la mañana.

Los vecinos, que a esta hora llegaron al baldío donde fue hallado el cuerpo, se inclinan por la versión de que el hombre “cometió una locura” y no por un “ajuste de cuentas”. Lo describen como “humilde” pero insisten en que nada los hacía pensar que él podía haber actuado así.

Según Palacios, el detenido tiene antecedentes que van “contra la integridad sexual”, y que además al momento de la detención no se resistió.

Fuente: La Nación