Autoridades del Servicio Penitenciario de la provincia de Santa Fe pusieron en funcionamiento este viernes un body scanner en la cárcel de Coronda para intentar frenar el ingreso de teléfonos a presos alojados en la unidad penitenciaria ubicada a 40 kilómetros de la ciudad capital.
“Estamos en etapa de prueba”, comentó al respecto el director del Servicio Penitenciario, Walter Gálvez, quien además anticipó que el próximo lunes se instalará el mismo detector en la cárcel de Piñero, situada a 22 kilómetros de Rosario y la cual tiene la mayor población penal de la provincia.
Gálvez aclaró de todas maneras que el scanner se sumará a las otros tipos de requisas que se realizan de manera manual en los ingresos a los distintos establecimientos penitenciarios santafesinos. “No va a reemplazar la requisa manual que se viene realizando”, destacó.
De la presentación también participó el nuevo ministro de Seguridad, Claudio Brilloni, quien aprovechó la oportunidad para solicitar mayores recursos logísticos para garantizar la lucha contra el crimen organizado, como así también la prevención.
El funcionario, además, reiteró que su gestión tendrá como eje sancionar a los empleados policiales infieles. “Aquel funcionario que elige vivir al margen de la ley o cometer algún hecho ilícito, va a ir preso”, advirtió.
De qué se trata el sistema de «body scanners»
Se trata de tecnología de última generación que tiene como objetivo detectar el ingreso de elementos prohibidos al servicio penitenciario. Serán utilizados tanto para el registro de las visitas, como del propio personal de seguridad. El primero, un detector por el que ingresarán todos los bolsos, mochilas o equipajes que las visitas de los presos y los agentes penitenciarios lleven a las instalaciones.

Respecto al body scan o scanners corporal, es un aparato que utiliza rayos x para poder observar bajo algunas capas físicas, como ropa, la piel, etc. El sistema permitirá detectar amenazas ocultas o, incluso, dentro del cuerpo o en las cavidades corporales, como por ejemplo armas metálicas y no metálicas, drogas, teléfonos celulares, contrabando de todo tipo, explosivos, herramientas. Por último, la instalación también contempla un detector de metales.




