El Papa León XIV presidió este domingo el rezo del Regina Coeli desde el balcón de la Basílica de San Pedro, en su segunda aparición pública tras ser elegido pontífice el pasado jueves. La tradicional oración mariana, propia del tiempo pascual, congregó a miles de fieles en la Plaza de San Pedro.
En su mensaje, el primer Papa de origen estadounidense instó a orar por las vocaciones sacerdotales y consagradas, subrayando la necesidad de contar con modelos creíbles de entrega a Dios para los jóvenes.
Durante su intervención, León XIV también abogó por el cese de los conflictos armados en Ucrania y Medio Oriente y celebró el reciente acuerdo de tregua entre India y Pakistán.
Un día antes del rezo del Regina Coeli, León XIV visitó la tumba de su predecesor, el Papa Francisco, en un acto de recogimiento que reafirma la conexión espiritual entre ambos pontificados.
El nuevo pontífice se trasladó hasta la basílica de Santa María la Mayor, templo frecuentado por Jorge Mario Bergoglio, fallecido el pasado 21 de abril. Allí, León XIV se arrodilló y rezó en silencio ante la tumba de mármol blanco donde descansan los restos del Papa argentino.
Fuentes del Vaticano informaron que se trató de una visita privada, elegida personalmente por León XIV como primer gesto de tributo a Francisco, destacando el carácter sobrio y cercano que marcó su pontificado.
El nuevo Papa ya ha manifestado que su misión estará inspirada por el ejemplo de vida sencilla y servicio que caracterizó a su predecesor, cuyo legado sigue vigente entre los fieles.