Una llamada telefónica alertó a personal policial de Laguna Paiva sobre el hallazgo de motores eléctricos abandonados. Lograron su secuestro mientras se inicia investigación ante posible robo.
Un llamado al 911 alertó a los uniformados que en inmediaciones de Av. Lamber, en un zanjón, había al menos cuatro motores de grandes dimensiones abandonados.
Los uniformados llegaron al lugar, comprobaron que el llamado era verdadero y pidieron colaboración al Comando Radioeléctrico para su traslado a la comisaria.
Los motores permanecen en deposito al aguardo de la aparición de algún damnificado.
