El acumulado anual es uno de los peores de la década. Alimentos resistieron, pero rubros no esenciales cayeron fuerte. El informe apunta a un retroceso estructural del consumo.
Un informe del Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe (CES-BCSF), basado en la Encuesta de Supermercados del INDEC, reveló que las ventas en supermercados de la provincia muestran una tendencia negativa sostenida en los últimos 10 años. Pese a un leve repunte interanual del 1,1% respecto a 2024, el acumulado de 2025 se posiciona como el segundo registro más bajo desde 2015.
El estudio destaca que el gasto en alimentos y bebidas explicó casi el 74% del total de ventas, aunque en términos reales este rubro cayó 1,6% frente al promedio de la última década. Subrubros como carnes, panadería y verdulería mostraron incrementos, mientras que almacén, bebidas y lácteos registraron caídas.
La caída fue más pronunciada en bienes no esenciales. Indumentaria, calzado y textiles para el hogar retrocedieron cerca de 30%, mientras que electrónicos y artículos para el hogar sufrieron una contracción superior al 44%. Otros rubros como artículos de limpieza y perfumería también mostraron retrocesos significativos.
El informe concluye que, aunque los alimentos resistieron mejor, los bienes semidurables y durables fueron los más afectados. Los resultados corresponden exclusivamente a supermercados y no reflejan necesariamente el consumo total, donde otros canales, como el comercio electrónico, ganaron participación durante 2025.




