En poco más de una hora cayeron casi 88 milímetros de lluvia, generando inundaciones en barrios, ingreso de agua en viviendas y colapso momentáneo de desagües. Pese a la intensidad, el sistema urbano logró drenar durante la madrugada.
Una intensa lluvia sorprendió a la ciudad de Rafaela durante la noche de Nochebuena, provocando anegamientos en numerosos barrios y generando una situación de urgencia para cientos de vecinos. En apenas minutos cayó una gran cantidad de agua, lo que complicó seriamente la circulación y alteró el normal desarrollo de la noche.
El fenómeno se manifestó con extrema intensidad, dejando acumulados muy importantes en un lapso corto de tiempo, lo que derivó en calles completamente cubiertas por el agua y veredas intransitables en distintos sectores de la ciudad.
Uno de los puntos más afectados fue el cruce de Tucumán y avenida Gabriel Maggi, donde las imágenes registradas muestran un verdadero diluvio urbano, con el agua cubriendo gran parte de la calzada y dificultando el tránsito vehicular. Situaciones similares se repitieron en otros barrios, donde los desagües colapsaron ante la magnitud de la lluvia.
La tormenta generó complicaciones durante varias horas y mantuvo en alerta a los vecinos, que siguieron atentamente la evolución del clima durante la madrugada.
Según datos de la Estación Meteorológica de la Experimental del INTA, cayeron 87,6 milímetros en poco más de una hora. Tal como ocurrió en noviembre, el registro de diciembre ya superó ampliamente la media histórica, que es de 121,9 mm para el último mes del año. En lo que va de diciembre ya se acumularon 167,7 mm.
Además, cientos de hogares registraron ingreso de agua, principalmente por el colapso de desagües internos y por la imposibilidad de las calles de absorber los excedentes. En varios casos, conexiones indebidas de desagües pluviales a la red cloacal provocaron una presión extrema sobre el sistema, lo que derivó en que esta mañana se observaran bocas de registro desbordando líquidos, una práctica que no está permitida.
La lluvia también afectó dependencias públicas y comercios cerrados, entre ellos el subsuelo del edificio municipal. Por otro lado, el desvío del tránsito pesado por el Camino 27 o avenida Tettamanti permanecía completamente inundado durante la mañana de este jueves, a la altura del canal aliviador entre Gabriel Maggi y el Camino 5.
Pese a la violencia del temporal, el sistema de desagües de la ciudad logró resistir la prueba. Hacia las 2 de la madrugada, ya no quedaban rastros significativos del evento en la mayoría de las calles, quedando sólo algunas ramas y un par de árboles caídos como testimonio de la fuerza de la tormenta.
