La pandemia sigue dejando vacíos y dolor, esta vez ocurrió en la vecina localidad de Monte vera. En el mes corriente perdieron la vida 4 integrantes de una misma familia. Los difuntos son Gabriela Romero (86), Susana Sandoval (55), Rosalía Sandoval (62) y Víctor Verón (79). Todos a causa del coronavirus, a excepción de Gabriela que tuvo una afección febril que no fue identificada.
Cabe destacar que Susana y Rosalía son hijas de Gabriela Romero y ambas cuidaban a su madre que estaba internada por recomendación médica. En el transcurso de ir y venir del hospital las mujeres se contagiaron y eso provocó el deceso de ambas. A su vez, Víctor Verón, yerno de la mujer de 86 años, fallece también por covid con una baja saturación de oxígeno en sangre.
Julio Sosa, esposo de una de las mujeres difuntas nos relata los hechos en primera persona: “Desde el domingo 9, a las 9:30 horas se llevaron a mí esposa Susana al sanatorio Santa Fe, desde allí la derivaron al Cullen, estaba al límite 89/90 de oxígeno en sangre. Los dos estábamos tomando un antibiótico por faringitis, pero ella dejo de tomarlo porque le estaba haciendo mal, una reacción adversa. Días antes de que se internara, ella tenía fiebre, tocía mucho y de tanto toser, le dolía la cabeza, por todo ello es que decidimos que se interne. Del Cullen la trasladaron al hospital Iturraspe viejo en la unidad UTI (Unidad de Terapia Intensiva). El lunes 10, le hicieron un tratamiento con corticoide. Tenía una insuficiencia respiratoria en sangre y ella sentía que le faltaba el aire. Teniendo el celular con ella, me escribió diciéndome “Yo estoy acá creo que bien. Con tantos medicamentos y pinchazos no me encuentran las venas”. También relataba que: “Previo a que se internara Susana, mi suegra estuvo internada en el sanatorio mayo por unos 15 días, porque tenía fiebre y le hicieron un sin fin de estudios y no le encontraron nada. El 30/4 le dijeron que le iban a dar el alta y le cambiaron la bocha diciéndole que no, los hijos firmaron el alta voluntaria y la cuidaron en su casa hasta que el sábado 8/5 a las 21:10 horas partió a la Presencia de Dios. Es muy posible que se haya contagiado en esos días que la iban a cuidar a mi suegra en el sanatorio Mayo, mi esposa Susana, Rosalía la hermana e Isabel una sobrina. Yo como único que tiene un vehículo en la familia, llevaba y traía a los cuidadores”.
Sin dudas que este hecho golpea y mucho, pero a su vez nos tiene que ayudar a tomar conciencia y a seguir cuidándonos, a ser responsables y a acatar todas las medidas dispuestas por las autoridades. Ante esto, Julio nos afirma que “la sociedad está muy relajada, se confía y cree que lo puede superar, pero no, hay que tomar todos los cuidados”. Cabe destacar que la familia es reconocida y querida en la localidad, es por eso que el hecho provocó mucha consternación.
