Cuándo y por qué decidió Messi regresar a la selección argentina

A contramano de un regreso a viva voz que impulsó la AFA desde finales del año pasado, Lionel Messi resolvió en las últimas semanas volver a la selección . Este mediodía aparecerá en la lista que comunicará Scaloni para los próximos amistosos de la Argentina y así el crack de Barcelona le pondrá fin a su paréntesis más prolongado con el conjunto nacional. Nunca en su carrera estuvo tanto tiempo alejado del conjunto albiceleste: no juega desde el 30 de junio del año pasado, cuando Francia lo eliminó en los octavos de final del Mundial de Rusia. Si después juega solo contra Venezuela, en Madrid, y no viaja a Tánger para el segundo duelo con Marruecos, se develará próximamente. Pero Messi está de vuelta.

Cuando Messi luzca nuevamente el brazalete de capitán ante los venezolanos, en el estadio Wanda Metropolitano del Atlético de Madrid, habrán transcurrido 261 días.


Ahora sí, porque esta ‘ventana FIFA’ es la única antes de la Copa América de Brasil, que comenzará el 14 de junio. Si Messi quiere sacarse la espina de conquistar un título con la selección, sería la opción más a su alcance. Para el Mundial de Qatar, en noviembre/diciembre de 2022 falta una eternidad. Sin olvidar que, por entonces, Messi ya habrá cumplido 35 años.

La decisión podía ser repentina. Fuentes de Barcelona que comparten con el rosarino el día a día, a principios de año habían anticipado que Messi solo se había permitido deslizar “quizá en 2019 haya una chance de que vuelva a la selección”. Y no avanzaba de allí. Merodeaba sus pensamientos, pero todavía no se ponía una fecha. “No dependerá de la coyuntura del fútbol argentino. Si Leo esperara las condiciones ideales para jugar en la selección, nunca hubiese llegado a 128 partidos”, agregaron. “Será una decisión íntima, en función de sus sensaciones, nostalgia, deseo, entusiasmo…, pero exclusivamente pasará por él”, ampliaban. El sentimiento por la camiseta estaba probado, pero aún no se detenía a analizar qué quería hacer.

Scaloni siempre eligió ser más cauteloso que Tapia. Nunca lo asfixió a Messi, ni hizo declaraciones públicas que condicionaran al rosarino. En estos meses hablaron en varias oportunidades. Por teléfono y también en Europa. “Estimo, deseo y creo que va a volver a jugar en la selección”, confiaba el entrenador. “La camiseta número 10 va a seguir en la utilería”, siempre insistió, confiando en poder dársela en mano.
Que Scaloni y Messi sostuvieran periódicas charlas ilusionaba a todos. En la AFA asumían que era un guiño del rosarino, un pulgar alzado sin hablar. Se aferraban a los gestos, como una foto que el rosarino subió en sus redes sociales en la que lucía un short de la selección, y otra de un termo con la bandera argentina.

Además de no jugar, Messi también resolvió no hablar en los medios sobre la selección. No fue casual que, en septiembre del año pasado, cuando en Radio Catalunya rompió el silencio que guardaba desde la eliminación en Rusia, no hubo preguntas sobre la selección. No fue casual, tampoco que, a finales de diciembre, en una extensa entrevista con el diario Marca tampoco hubiera ni una mínima mención al pasado o a su futuro en código albiceleste.

Fuente: La Nación.


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