El ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, volvió a cerrarle la puerta a toda posibilidad de reanudar la negociación salarial, tal como reclaman los gremios del sector público provincial. La posición del Ejecutivo es aferrarse a lo acordado en marzo, esto es reabrir la mesa de diálogo recién en septiembre, según la cláusula de revisión.
Pusineri remarcó que: «Hoy la decisión del gobierno es cumplir con lo que se acordó oportunamente. Es decir que lógicamente monitoreamos semana a semana las variables inflacionarias». «Hay una paritaria que en su momento llevó adelante Festram y que se está desarrollando; de allí en más cualquier modificación deben hablar con los intendentes y presidentes comunales, que son los empleadores, y siempre tomando como piso lo que se acordó en su momento», agregó el ministro.
La estrategia de la Casa Gris, para el caso del gremio municipal, es correrse y dejar que los sindicatos pugnen directo con los intendentes. Tal como ocurre con Rosario, Santa Fe y Rafaela, que emplean a la mitad de los trabajadores municipales de la provincia. «Allí no hay ninguna necesidad de que la Provincia intervenga, y todo tiene que resolverse dentro de la relación de cada intendente con sus empleados», expresó el funcionario.
Para el resto de los trabajadores del aparato estatal –esto es docentes y empleados de la administración pública–, la posición del gobierno provincial es atenerse a lo firmado y aguantar hasta septiembre.