India inauguró la estatua más alta del mundo

Llovieron pétalos de rosas que caían desde helicópteros en pleno vuelo. En el cielo flotaban globos con los colores patrios. Y los aviones de la fuerza aérea pasaban rasando. Abajo, en la tierra, miles de personas miraban al gigante de pie, en acero y bronce, recién nacido. La India inauguró así este miércoles la estatua más alta del mundo, de 182 metros de altura, construida en honor a uno de los héroes nacionales, Sardar Patel, artífice de la unidad del nuevo país surgido tras la independencia de los británicos en 1947 y la partición del subcontinente.

“Me inclino ante el hombre que evitó la conspiración que buscaba partir la India en pedazos, el hombre que puso fin a todas las dudas sobre el futuro de la India”, manifestó durante la inauguración el primer ministro indio, Narendra Modi, impulsor del proyecto.


La escultura que lleva por nombre Estatua de la Unidad, reunió a una multitud y puso en alerta a 5000 policías en una remota localidad del estado de Gujarat, junto al río Narmada.

La obra demandó 350 millones de euros y unos cinco años de trabajo. Y al final cosechó polémicas a pesar del “placer” expresado por Modi a la hora de inaugurar una escultura que es “una respuesta a todos aquellos que cuestionan la existencia de la India”.

“La altura de la estatua es para recordar a la juventud que el futuro del país será así de enorme”, celebró Modi, quien agregó que la obra es el símbolo de “la habilidad técnica y de ingeniería del país”.

Con lo cual, al final, la obra faraónica pareció una demostración de poder con tono electoral, que a no todos les cayó bien.

Si bien la policía lo negó, medios locales estimaron que al menos 12 personas fueron arrestadas el martes porque planeaban protestar. Unas 185 familias fueron sacadas de sus tierras para construir al gigante y recibieron nuevas tierras. Pero no fue suficiente. El enfado persistió.

La zona es hogar de, mayormente, grupos tribales con un estatus especial. Los jefes de 22 aldeas locales firmaron una carta pidiendo que Modi no se acercara a la inauguración.

Carteles de Modi con el gobernador de Guajarat, Vijay Rupani, fueron arrancados durante el fin de semana. Y sus caras ennegrecidas. La policía puso nuevos.

“Los grupos tribales han sido explotados por diferentes gobiernos, el gobernante BJP (partido Bharatiya Janata) lo está haciendo nuevamente”, dijo el legislador local y líder del grupo comunitario Chotu Vasava.

“No estoy en contra de Sardar, pero ¿de qué sirve la estatua si las personas en la tierra tienen que sufrir y mudarse de sus hogares?”

La enorme figura de bronce de Patel incluye un memorial, jardines y un museo, además de ascensores para 15 mil turistas que a diario, se estima, visitarán el lugar por unas 135 rupias (casi dos dólares).

La faraónica escultura ha sido ideada como un centro para los turistas con hoteles e incluso una flota de barcos que permitirán alcanzar la zona.

Según analistas, esta efigie, que ha desbancado del primer puesto en altura al Buda del Templo de Primavera, de 153 metros situado en China, es un acto temprano de campaña electoral antes de los comicios generales del año próximo.

Patel perteneció al ahora opositor Partido del Congreso y fue ministro de Interior en el primer Gobierno de la India independiente, encabezado por Jawaharlal Nehru, pero se ha criticado que Modi busca crear una historia paralela de la independencia para vincular el nacionalismo hindú y a su partido con figuras clave.

Fuente: EFE, AFP y The Guardian


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