Hace una semana la ciudad de Paraná comenzó a mostrar un ritmo y un ambiente diferente al habitual y en las calles, se comenzó a sentir el evento más colorido de la capital entrerriana: La Fiesta de Disfraces, un elemento distintivo de la ciudad de Paraná y que trasciende las fronteras para convertirse en la fiesta de disfraces más importante del continente.
Con capacidad hotelera agotada desde el pasado jueves, y con derivaciones de turistas a ciudades aledañas, la ciudad también se disfraza, ya que en los comercios, bares, restaurantes, taxistas y, remiseros que disfrazan los vehículos. Hasta el edificio municipal mostró una temática fachada.
La nota de este año fue la multitudinaria previa que se vivió en la zona del Rosedal, sobre el Parque Urquiza. Además, en las redes, las publicaciones que fueron realizando los disfrazados que comenzaron desde temprano, a vivir la Fiesta de Disfraces.
Por otra parte, la mayor parte de la gente que llegó a la fiesta contó que es la primera vez que concurre al evento, pero otros ya lo hacen desde hace varias ediciones.
SEGURIDAD
El Jefe de la Departamental de Policía de Paraná, Marcos Antoniow, destacó el operativo que se llevó a cabo durante la Fiesta de Disfraces y dio cuenta que, como ha sucedido años anteriores, la vigésima edición se desarrolló con total normalidad.
Sobre la cantidad que gente que asistió al evento, confirmó que «47.000 personas ingresaron al predio por el molinete, superó las expectativas de años anteriores». Para dar cuenta de ello, Antoniow detalló que llegado un momento, previo al ingreso al predio, «la gente abarcaba las dos manos del Acceso Norte, lo cual impresionaba y causaba sensación de asombro».
Consultado sobre si hubo heridos y la atención brindada en la carpa sanitaria, contó que desde la carpa de Sanidad dispuesta cerca de la YPF, se derivaron ocho personas al hospital San Martín por ingesta de alcohol. Por otra parte, relató que «el cuadro más grave fue un accidente laboral de un hombre que estaba en el escenario y se cayó. Sufrió politraumatismo». También fue atendida otra persona con una torcedura de tobillo; mientras que un joven de 27 años debió ser derivado al hospital San Martín ya que presentaba una herida cortante «que podría ser de un arma blanca, una botella o un vidrio. Estaba frente al escenario y habría sido producto de una riña».
Por otra parte, Antoniow dio cuenta que «fuera de los controles de los corredores hubo varios detenidos por robo de celulares, y se recuperaron 6 equipos. En otros puntos aledaños a los ingresos hubo arrebatos comunes».
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