En estos días de cuarentena, nieta y abuelo, desde Rosario a Paraná, encontraron la excusa perfecta para unirse más que nunca.
Se trata de Daiana y Eriberto, ambos de Paraná. Desde el 2007 Daiana vive en Rosario, pero lo que siempre los unió fue su gusto por la escritura y la lectura, y la cuarentena obligatoria, no fue un impedimento para ellos.
En estos días de aislamiento obligatorio, hallaron la manera perfecta de mantenerse juntos: comparten a la distancia un capítulo de un clásico de la narrativa gauchesca: «Excursión a los indios ranqueles de Lucio V. Mansilla» se trata de un libro, que casualmente se presta de gran forma para esta dinámica, ya que se encuentra escrito en forma de cartas, que le envía Mansilla a su amigo, contándole con lujo de detalle todas las perspicacias del viaje hacia las tolderias de los ranqueles.
Este libro Eriberto lo leyó hace más de 70 años, y era un pendiente en la lista de Daiana. Por eso hoy a sus 94 años, a pesar de sus impedimentos visuales, disfruta los audios que Daiana le graba y le envía con cada uno de los capítulos. Es una experiencia edificante para ambos, Daiana por su parte siente que de una forma acompaña a su abuelo a la distancia, y Eriberto, es invadido por la emoción de oír a su nieta, mientras miles de recuerdos de su juventud, llegan a su memoria.
Antes de la lectura a distancia que comparten por estos días, ellos ya habían trabajado juntos en un libro: el lo escribió, ella lo corrigió y lo editó, el libro se llama Huellas flamencas en Villaguay: Colonos belgas 1880-1930.