El diálogo permitió acercar posiciones y destrabar el conflicto. Se establecieron pautas comunes y controles periódicos. Las decisiones regirán desde inicios de diciembre.
Después de varios días de tensión entre pescadores y autoridades provinciales por la inminente veda para la exportación, esta mañana se alcanzó un acuerdo en la sede del Ministerio de Ambiente de Santa Fe.
La reunión, de la que participaron funcionarios y referentes del sector, permitió destrabar el conflicto que había derivado en protestas y cortes de ruta.
El secretario de Ambiente, Franco Ponce de León, confirmó que la resolución vigente será reemplazada por una nueva normativa que comenzará a regir el próximo 3 de diciembre. Hasta ese día, la actividad continuará con normalidad, sin restricciones adicionales.
El objetivo central, explicó, es unificar criterios con la provincia de Entre Ríos para evitar desfasajes en las reglas que regulan la actividad en ambas orillas del río.
Entre los puntos acordados se encuentra la implementación de días de pesca unificados, con cuatro jornadas laborales semanales y vedas los lunes, sábados, domingos y feriados. Además, se fijará un cupo máximo de extracción por trimestre, medida que busca disminuir la presión sobre las especies más capturadas y favorecer la sostenibilidad del recurso ictícola.
Otro eje clave será el monitoreo permanente del estado del río y de las poblaciones de peces. Para ello, se realizarán evaluaciones técnicas trimestrales que permitirán ajustar la normativa si fuera necesario.
Desde el Gobierno provincial destacaron que la nueva resolución es “superadora” y que apunta a consolidar un manejo responsable y coordinado de la actividad pesquera en la región.
