Un fuerte temporal volvió a poner en alerta a gran parte del sur de la provincia de Santa Fe este fin de semana, con registros de precipitaciones extraordinarias que ocasionaron anegamientos, evacuaciones y complicaciones en la red vial.
La localidad de María Teresa, ubicada en el departamento General López, fue una de las más golpeadas: se reportaron cerca de 300 milímetros de agua caída en pocas horas, una cifra que sorprendió incluso a las autoridades.
El director provincial de Protección Civil, Pedro Obuljen, confirmó que unas 100 personas fueron evacuadas y otras tantas se autoevacuaron. Además, destacó que el gobierno provincial activó un operativo de asistencia con la entrega de módulos alimentarios, colchones y frazadas. “Nadie espera 300 milímetros en tan poco tiempo”, expresó el funcionario, al tiempo que valoró el trabajo conjunto con comunas e intendencias de la zona.
Desde la Comuna de María Teresa informaron mediante un comunicado que la situación “es muy complicada” y que están trabajando intensamente junto a Bomberos Voluntarios, Defensa Civil y el gobierno provincial. “Si bien el agua comienza a salir del pueblo, todavía ingresa mucha desde la zona rural. Hay familias evacuadas, aunque ninguna persona presenta problemas de salud”, indicaron.
Red vial afectada
El temporal también tuvo un fuerte impacto en las rutas del sur provincial. Según el último reporte de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), se registran los siguientes inconvenientes:
- Ruta Nacional 33: corte total entre Zavalla y Casilda, con desvíos hacia la RN A012 y RP 26s.
- Ruta Nacional 9 (vieja): corte total entre Armstrong y Carcarañá, con desvíos hacia la Autopista Rosario–Córdoba.
- Ruta Nacional 11: corte a la altura del acceso a Pueblo Irigoyen (RP 41s).
- Ruta Provincial 14: circulación con precaución en la zona de María Teresa.
- Ruta Nacional 8: tránsito con precaución en la curva Pastorino, en Venado Tuerto.
Localidades más afectadas
Las lluvias más intensas se concentraron en el sur provincial. En localidades como Arteaga, La Chispa, Christophersen y María Teresa, se registraron acumulados cercanos a los 290 milímetros, lo que provocó calles totalmente anegadas y en algunos casos el ingreso de agua a las viviendas.
El fenómeno dejó en claro, una vez más, la vulnerabilidad de la región frente a eventos climáticos extremos, que impactan de lleno en las comunidades y su infraestructura.