El pasado sábado, después de las 16 horas, Genaro Duarte, un joven de 18 años que había sufrido un brutal ataque en el playón de Varadero Sarsotti, ingresó sin vida al hospital Cullen.
Duarte fue trasladado con urgencia tras recibir heridas de bala que impactaron en su cabeza y abdomen izquierdo. A pesar de los esfuerzos de los profesionales de la Emergentología en el área destinada a pacientes críticos, los disparos resultaron fatales.
Originario del barrio Villa Hipódromo, el joven fue encontrado gravemente herido en las inmediaciones de la confluencia entre las transitadas calles Tacuaritas y Gallaretas, en el barrio Varadero Sarsotti. Los vecinos cercanos fueron testigos auditivos de los disparos y al salir de sus hogares, se encontraron con la impactante escena del joven tendido en el suelo, inerte y con heridas graves.
El aviso sobre este acto criminal se activó cuando los vecinos contactaron al servicio de emergencias 911 para informar el incidente. La respuesta rápida provino de oficiales y suboficiales de la Subcomisaría 1° (Orden Público) y del Cuerpo Guardia de Infantería CGI (Cuerpos), quienes llegaron al lugar para preservar la escena mientras coordinaban el traslado de la víctima al hospital.
Los efectivos policiales dialogaron con los residentes del área, recopilando información relevante y confirmando la existencia de cámaras de vigilancia, tanto públicas como privadas, que podrían haber captado imágenes cruciales para identificar a los responsables del asesinato de Duarte.
